martes, 1 de abril de 2014

Vergüenza ajena


Cuando un pibe roba una cartera lo llaman ladrón.
Cuando muchos adultos asesinan alevosamente a un pibe los llaman justicieros.
Cuando un pobre atenta contra la propiedad privada lo llaman inseguridad.
Cuando una turba de clase media atenta contra la vida lo llaman justicia por mano propia.
Cuando un chorro inflige la ley se aterran y reclaman mano dura.
Pero cuando una patota de asesinos masacra a un tipo indefenso se tranquilizan y se sienten bien, satisfechos y hasta valientes.
¡La puta madre que los parió!
A veces me dá mucha vergüenza ser humano.